18 de noviembre de 2007

RIMEL CORRIDO


Esta noche hablamos de amor
y te vi llorar por vez primera,
quisiera decir última
mejor habría sido nunca.

Llorabas con lágrimas entintadas
llorabas y me maldecías
por el rimel corrido,
por la gota derramada.

Hablábamos de amor como de cuchillos
de dos filos
(como si no lo supieras!)
que te lastiman.
Y puede ser.

Pero es que no llorabas lágrimas de hoy,
sino aquellas que debiste liberar
hace mucho, y yo lo sé
aunque no me lo digas.

Y es que llorabas
como el que una vez se quemó con leche
y tiempo después ve una vaca,
y la maldice,
aunque las vacas no sepan de amor.